La infidelidad suele tener consecuencias catastróficas en la mayoría de las ocasiones: puede acabar con la relación de pareja. La traición de la pareja, el plantearse si nos quiere o no, el haber echado por tierra un proyecto de vida en común..., todo ello hace que un alto porcentaje de parejas que sufren infidelidad terminen su relación, pero queda un porcentaje (20-30%) de parejas que son capaces de superar una crisis de infidelidad y de seguir juntos empezando de nuevo, incluso con más fuerza que antes.
Cuando se produce una infidelidad, hay que prestar atención a ciertas características:
Tipo/duración de la infidelidad. No es lo mismo una "aventura de una noche" o una infidelidad puntual que una relación paralela con otra persona. Suele decirse que a los hombres les importa más cuando ha sido una infidelidad sexual y que a las mujeres les importa más cuando ha sido una infidelidad emocional, pero lo cierto es que tanto a hombres como a mujeres les afecta más que además de sexo hayan existido sentimientos en la otra relación.
Relación de pareja fuerte y sólida. Se trata del vínculo que hay entre la pareja no sólo emocional, sino también si existen hijos, comparten estilo de vida, amigos, la relación con las familias políticas e incluso en temas económicos como compartir una hipoteca.
Características de la pareja. Se trata de la "personalidad" de la pareja, si suelen ser capaces de dialogar y perdonar, o si son rencorosos e incapaces de perdonar u olvidar.
Edad y duración de la relación. No es lo mismo una pareja joven que una pareja adulta y más madura, con más capacidad de reflexión. También tiene que ver mucho la duración de la relación de pareja, qué experiencia tienen como pareja.
Características de las parejas que tienden a superar una infidelidad:
La infidelidad ha sido una aventura breve y prácticamente sexual.
La pareja tiene hijos, amigos, estilo de vida, hipoteca en común. Tiene vínculos que hacen que piensen bien sus decisiones y sus consecuencias tanto a corto como a largo plazo.
La pareja tiene la capacidad de dialogar, perdonar, olvidar y empezar de cero, saben hacer "borrón y cuenta nueva".
La pareja tiene una relación de varios años y además se trata de una pareja adulta y madura.
Es posible que parejas que cuentan con estas características no sean capaces de superar una infidelidad, del mismo modo que hay parejas que no compartan estos factores y sí son capaces de superar esta situación. Cuando el deseo de la pareja es superar esta crisis pero por ellos mismos no lo consiguen, la terapia de pareja puede ser una buena opción.
Cuando se trabaja la infidelidad en terapia de pareja lo que se hace es buscar qué factores han llevado a que se haya producido la infidelidad, ver si la pareja quiere seguir vinculada y si es así, trabajar para corregir en el presente los errores que cada uno de ellos haya podido cometer en el pasado para que no vuelvan a ocurrir o para saber hacerlos frente y aceptar un nuevo compromiso de pareja basado en el perdón, sin rencores, y en la confianza mutua.
"Podemos tirar piedras, quejarnos sobre ellas,
pisarlas, o construir con ellas".
~William Arthur Ward~