Llega septiembre y los niños y niñas tienen que terminar sus vacaciones de verano para volver al cole. Esto significa dejar de pasar tanto tiempo con la familia, dejar de jugar todo el día, en algunos casos volver al uniforme de escolar,... de manera que se introducen cambios importantes en las rutinas de los niños y los papás y las mamás juegan un papel importante en la adaptación de su hijo o hija al colegio.
¿Qué pueden hacer los padres y las madres para favorecer la adaptación de nuevo al colegio?
1. Explicarle al niño con una actitud positiva que dentro de dos semanas, de diez días, de una semana... se acaban las vacaciones de verano y hay que volver al colegio y volverá a ver a sus amigos del cole, a comer en el comedor escolar, etc.
2. Preparar la vuelta conjuntamente con el niño. Ir juntos a comprar los libros de texto y el material escolar que necesite de manera que se hace partícipe al niño de la vuelta al cole, y además, estará encantado de ver todo su material nuevo.
3. Establecer rutinas de forma progresiva. Por ejemplo, despertarle cada día un poco antes para que se vaya acostumbrando a madrugar de cara al primer día de colegio.
4. Recordarle momentos divertidos y momentos de juego que ha pasado con sus compañeros en el colegio para motivarle y evitar la temida frase de "No quiero ir al cole".
5. Una vez iniciado el periodo escolar, no cambiar todas las rutinas de golpe, es decir, seguir haciendo algunas de las actividades de ocio que hacía durante las vacaciones de verano para que el cambio no sea tan radical.
En resumen, estas cinco pautas lo que persiguen es el cambio progresivo de rutinas en los niños y motivarles con una actitud positiva hacia la vuelta al cole para que su adaptación sea lo más sencilla y cómoda posible.