¿Sabíais que el miedo al atragantamiento es un miedo muy común? En consulta se encuentra con bastante frecuencia asociado a otras problemáticas. Te contamos más sobre esta fobia específica.
¿Qué es el miedo al atragantamiento?
El miedo al atragantamiento, también llamado fagofobia, es un miedo irracional a ahogarse al ingerir cualquier tipo de comida o bebida.
¿Cuáles son las causas del miedo al atragantamiento o fagofobia?
La causa más común que hace que se desarrolle este miedo es o bien haber sufrido un episodio de atragantamiento en primera persona, o bien haberlo presenciado en alguna persona cercana. Este acontecimiento funciona como un trauma y hace que se desarrolle este miedo durante un largo periodo de tiempo si no se trata. A pesar de que todos en algún momento podemos haber sufrido un pequeño atragantamiento, o uno más importante, no todo el mundo acaba padeciendo esta fobia. Esto se debe a otros factores. Por ejemplo, puede desarrollarse esta fobia si ha habido una sobreprotección o preocupación excesiva de los padres en cuanto al atragantamiento en la infancia y es entonces cuando la persona puede adoptar esa preocupación en su vida adulta. Pero hay otros variados factores que pueden estar en el origen de este miedo.
¿Qué síntomas encontramos en el miedo al atragantamiento?
El miedo al atragantamiento es un trastorno que se ve reflejado en una respuesta física. En este caso, las personas que sufren fagofobia sienten como su garganta se estrecha cuando se encuentran frente a una situación en la que tienen que ingerir algún tipo de alimento o bebida. Al ser una fobia específica, los síntomas se asocian con la ansiedad y pueden ser algunos como la dificultad para respirar, opresión en el pecho o sudoración. Todos estos síntomas se asocian con el momento de comer y si no se controlan, puede llegarse a desencadenarse un ataque de pánico.
Además de estos síntomas físicos, se producen otro tipo de síntomas más relacionados con la conducta. Por ejemplo, las personas que tienen miedo al atragantamiento suelen masticar la comida por un largo periodo de tiempo para asegurarse de que esta pasará fácilmente por su garganta. Incluso, evitan comer alimentos que sean demasiado sólidos y generalmente comen purés, sopas y otros alimentos líquidos.
Cuando se acerca el momento de comer, la persona con fagofobia anticipa que va a atragantarse y es entonces cuando comienzan todos estos síntomas, que le impedirán ingerir alimentos o hacerlo de manera relajada y cómoda. Por lo tanto, evitará cada situación en la que tenga que enfrentarse a la comida ya que le supondrá un malestar muy intenso.
¿Qué consecuencias puede tener la fagofobia?
Por un lado, hay que tener en cuenta las consecuencias que tiene la ansiedad sobre la calidad de vida y/o la aparición de otros trastornos como la depresión. Incluso puede derivar en un trastorno obsesivo compulsivo o en otros trastornos de ansiedad, así como en otras fobias específicas relacionadas con la alimentación.
Por otro lado, destacan las consecuencias asociadas al déficit de ingesta. Por ejemplo, el dejar de ingerir comida sólida limita la variedad de alimentos y puede producir una falta de ciertas vitaminas y nutrientes necesarios para nuestro funcionamiento. Además de la desnutrición, otra consecuencia importante que puede ocurrir es la pérdida indeseada de peso.
A nivel social también se pueden sufrir algunas consecuencias como el aislamiento social. La persona puede evitar ir a tomar algo con sus amigos, por ejemplo, por miedo a atragantarse o incluso por miedo a presenciar que los demás se atraganten y de esta manera, pueden debilitarse las relaciones sociales.
¿Cuál es el tratamiento en el miedo al atragantamiento?
El tratamiento de la fobia al atragantamiento en terapia es rápido y eficaz.
Se utilizan diferentes técnicas como
La psicoeducación en fisiología, para que el paciente entienda que su garganta realmente no se estrecha.
Técnicas de relajación, para conseguir controlar la activación y los síntomas de ansiedad durante las comidas así como de distracción.
Una exposición suave y gradual a diferentes alimentos y situaciones tanto en imaginación como en vivo.
Introducir actividades que se han evitado debido a este problema y que antes el paciente realizaba como por ejemplo comer en público con más personas.
Con ayuda de familiares, establecer refuerzos positivos cuando el paciente cumpla determinadas metas para que se sienta motivado.
¿Has identificado que tienes un problema con el miedo a atragantarte? ¿Le ocurre a algún familiar cercano? La fagofobia es una fobia específica que tratamos en nuestra consulta, por lo que pedir cita en nuestro despacho y estaremos encantados de atenderte.
Este artículo ha sido redactado por María Roa,
Psicóloga General Sanitaria colaboradora
en el Centro de Psicología Sonia García
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